Canindeyú
Jefes policiales de Canindeyú no fueron barridos, sino reubicados en puestos clave
Todos los jefes policiales y los fiscales continúan en la zona de Canindeyú, pese a que la ciudadanía honesta pidió una “barrida general” para garantizar que el asesinato del periodista Pablo Medina y de la joven Antonia Almada no quede impune. Es más, el comisario principal Carlos Aguilera, quien era jefe de la Comisaría de Itanará, distrito dominado por los narcos, fue designado jefe de la comisaría de Curuguaty.
Los fiscales de Curuguaty Néstor Cañete, Christian Royg y Lorenzo Lezcano, así como el director de la Cuarta Zona Policial, comisario principal Ramón Víctor Palma Brítez; el jefe de policía departamental, comisario principal Celso Zelada; el titular de Investigación de Delitos, comisario principal Juan Barúa, y el comisario principal Rutilio Ramírez, jefe de Investigación de Curuguaty, siguen en sus puestos.
El martes último, el comisario principal Carlos Aguilera, quien se desempeñaba como jefe de la comisaría de Itanará fue trasladado a la Comisaría 5ª de Curuguaty. Con el cambio, está cerca de los investigadores del asesinato de Medina, pese a su sospechosa inacción en una zona dominada por el narcotráfico como lo es Itanará.
Supuestamente, su traslado se debió a que el comisario Félix Benítez, exjefe de dicha dependencia, realizará un curso en Asunción. En Itanará fue nombrado el subcomisario Aldo Morel, exjefe del Grupo Especial de Operaciones (GEO), sede Salto del Guairá.
Existen serias sospechas de que esta misma estructura protege a los narcos que mataron a Medina y Almada. El periodista, que se desempeñaba como corresponsal del diario ABC en la zona dominada por los grupos mafiosos, denunciaba constantemente a los clanes de narcotraficantes que operan en la región.
Es más, dejó un relatorio en el que menciona a los criminales que lo amenazaban de muerte y mencionó a la diputada colorada Cristina Villalba como madrina del clan dirigido por el intendente prófugo de Ypejhú, el colorado Vilmar “Neneco” Acosta, acusado de ser el autor moral del doble asesinato.
A pesar de que desde un principio se manejó la versión de que “Neneco” Acosta Marques estaba oculto en una propiedad del intendente de La Paloma del Espíritu Santo, Carlos “Cabrito” Villalba (ANR), hermano de la diputada Cristina Villalba, los investigadores no allanaron el inmueble.
Conexión directa
Los integrantes de la Policía Nacional tienen conexión directa con los poderosos narcos que responden a los capomafiosos, según los datos. El titular de la comisaría de Villa Ygatimí, el subcomisario Américo Alvarenga, ni siquiera fue relevado de su cargo, a pesar de que en su jurisdicción fue asesinado Pablo Medina y su acompañante Antonia Almada en la tarde del pasado 16 de octubre por los sicarios Wilson Acosta y su sobrino Flavio Acosta Riveros, hermano y sobrino, respectivamente de Vilmar Acosta.ABC
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